ISO 5060:2024
Evaluación de resultados de traducción

La norma ISO 5060:2024 ofrece un marco integral para la evaluación de resultados de traducción, tanto de traducciones realizadas por humanos como de aquellas generadas mediante herramientas de traducción automática, revisadas o no. En un contexto donde la globalización y la demanda de servicios de traducción crecen de manera exponencial, la norma busca establecer un enfoque armonizado que garantice la calidad y coherencia de las traducciones, aportando valor tanto a los proveedores de servicios de traducción (PST) como a sus clientes.
¿Qué abarca la norma ISO 5060:2024?
Esta norma está pensada para que la utilicen los proveedores de servicios de traducción, que pueden ser traductores autónomos, agencias de traducción o departamentos de traductores internos. También está dirigida a clientes que requieren evaluaciones de la calidad de las traducciones y a instituciones educativas que forman a traductores. Aunque la norma no aborda aspectos como los procesos de garantía de calidad de la traducción o las acciones correctivas, sí proporciona directrices claras sobre cómo evaluar el resultado final de una traducción.
Enfoque analítico de la evaluación de traducciones
ISO 5060:2024 se basa en un enfoque analítico para la evaluación de las traducciones, lo que significa que el contenido traducido se examina minuciosamente en busca de errores específicos. Estos errores se clasifican por tipo y se les asigna un peso o grado de importancia basado en su gravedad, lo que permite obtener una puntuación final. Este sistema se aleja del enfoque holístico, que se centra en la impresión general de la traducción sin un análisis detallado de los errores.
Tipos de errores
La norma define una tipología de errores organizada en siete categorías principales:
- Terminología: uso inconsistente de términos o uso incorrecto de terminología.
- Precisión: errores como traducción errónea, omisión o adición de información.
- Convenciones lingüísticas: errores gramaticales, ortográficos o de puntuación.
- Estilo: incoherencias de estilo o registro.
- Convenciones locales: errores en la adaptación a formatos locales de fechas, números, monedas, etc.
- Adecuación al público: errores relacionados con referencias culturales específicas.
- Diseño y marcaje: problemas con el formato, la maquetación o los hipervínculos.
Cada error identificado se clasifica en función de su gravedad, que puede ser leve, grave o crítica. Un error crítico es aquel que impide el uso adecuado de la traducción, lo que puede generar graves consecuencias, como pérdidas financieras o daños a la reputación del cliente.
Competencias y cualificaciones de los evaluadores
Para garantizar que el proceso de evaluación sea preciso y objetivo, la norma ISO 5060:2024 también detalla las competencias y cualificaciones que deben tener los evaluadores. Estos deben contar con experiencia y formación en traducción, revisión y evaluación, así como competencias técnicas y culturales para comprender no solo el contenido lingüístico, sino también el contexto en el que se empleará la traducción.
La norma recomienda que los evaluadores tengan al menos una licenciatura en traducción o áreas afines, o experiencia equivalente documentada en el campo de la traducción y la revisión. Estas competencias garantizan que el evaluador sea capaz de identificar errores, clasificarlos correctamente y proporcionar comentarios constructivos a los traductores o proveedores de servicios.
El proceso de evaluación: fases y herramientas
El proceso de evaluación se divide en tres fases: preevaluación, evaluación y post-evaluación. Durante la fase de preevaluación, se definen las especificaciones del proyecto de traducción, como el tipo de contenido, el propósito de la evaluación y los recursos disponibles. También se decide si se evaluará todo el contenido o solo una muestra representativa.
En la fase de evaluación propiamente dicha, el evaluador utiliza una hoja de evaluación de la traducción, en la que se registran los errores identificados, su tipo, su gravedad y su impacto en la calidad general de la traducción. En función de la puntuación obtenida, la traducción puede recibir una calificación de «aprobada» o «no aprobada». Además, si se identifican errores críticos, la traducción se considera automáticamente no apta, independientemente de la puntuación total.
Finalmente, en la fase de post-evaluación, el evaluador proporciona comentarios detallados sobre la calidad de la traducción y puede iniciarse un proceso de resolución de disputas si el proveedor de servicios no está de acuerdo con la evaluación. Esta retroalimentación no solo sirve para mejorar el trabajo del traductor, sino también para optimizar futuros procesos de traducción.
Flexibilidad de la norma
Uno de los aspectos más destacados de la ISO 5060:2024 es su flexibilidad. Los usuarios de la norma pueden adaptar las especificaciones de la evaluación en función del tipo de contenido, el sector y el público objetivo. Por ejemplo, los errores de terminología pueden ser más graves en traducciones técnicas, mientras que los errores de estilo pueden tener mayor impacto en traducciones literarias o de marketing.
Además, la norma permite que los proveedores de servicios de traducción elijan si evaluarán todo el contenido traducido o solo una muestra. Esta flexibilidad es útil cuando los recursos de tiempo y presupuesto son limitados, pero es importante tener en cuenta que la evaluación de muestras puede no detectar todos los errores presentes en la traducción completa.
Importancia de la cohesión y la coherencia
Otro aspecto clave que aborda la ISO 5060:2024 es la cohesión y coherencia de la traducción. Estos dos elementos son fundamentales para que el texto sea comprensible y tenga sentido. La cohesión se refiere a la conexión entre las diferentes partes del texto, mientras que la coherencia está relacionada con la lógica del mensaje global. Aunque los errores de cohesión y coherencia pueden ser difíciles de detectar, su impacto en la calidad de la traducción es significativo.

La norma ISO 5060:2024 representa un avance significativo en la estandarización de los procesos de evaluación de traducciones. Al establecer criterios claros y detallados para identificar errores y evaluar la calidad de las traducciones, esta norma ayuda a mejorar la calidad del servicio y a garantizar que las traducciones cumplan con las expectativas de los clientes y con los requisitos legales o técnicos aplicables. Para las empresas de traducción y sus clientes, la norma ISO 5060:2024 es una herramienta esencial que permite garantizar la calidad y fiabilidad de las traducciones en un mundo cada vez más globalizado.